Todos necesitan un hombro para llorar de vez en cuando. Cuando las cosas van mal, ¿quién te escuchará? A menudo no es quién escuchará, sino quién merece el privilegio de presenciar su vulnerabilidad. Nadie es perfecto, pero no todos pueden soportar ver la imperfección en los demás. ¿Podrías ser el tipo de amigo que tiene un problema con eso?
¿Estás dispuesto a escuchar?
Hay todo tipo de personas en el mundo y quizás conozcas a muchas de ellas. Cuando se trata de compartir tu imperfección con otros, es sabio mostrar discernimiento. Compartir con la persona equivocada puede ser perjudicial para usted y para ellos. Es difícil ser vulnerable. Elegir imprudentemente puede hacer que tengas miedo de compartir de nuevo. También puede conducir a una relación rota.
La verdad es que no todos están preparados para manejar todas las situaciones. Una persona que aún no ha aceptado su lado imperfecto no estará a la altura de la ocasión para celebrar el suyo. Todos hemos sido ese amigo que ha sido menos tolerante. Reconoce cuándo estás actuando de esta manera. Hágale saber a su amigo que tal vez usted no sea el único en quien confiar en este momento. Luego, crece más allá de donde estás y aprende a ser más tolerante.
6 tipos de amigos que podrías ser tú
No te preocupes Tu puedes cambiar.
- Amigo jadeante: sienten que no te arrepientes lo suficiente por tu falso paso. Es su deber actuar mortificado en su nombre. Si eres tú, entonces toda simpatía por tu amigo, el que comparte, se ha ido por la ventana debido a tu sorpresa.
- Amigo comprensivo: en realidad, sientes lástima por el que comparte. Les das palmaditas en la espalda y sacudes la cabeza. En realidad estás diciendo que estás contento de no estar en esa posición. Es una posición bastante condescendiente que el accionista vulnerable no necesita en este momento.
- Amigo de adoración: este es el amigo que pensó que no podía equivocarse. El sol y la luna salen y caen sobre ti. Cuando profesas vulnerabilidad al compartir un error, no pueden sentir nada más que decepcionarse. El que comparte se siente mal por haberlo cargado.
- Amigo incómodo: a este amigo no le gusta admitir que también podría ser vulnerable. En un esfuerzo por no enfrentar sus propias faltas, no saben cómo lidiar con escuchar las suyas. Necesitan a alguien a quien culpar. Si es usted, es probable que la culpa recaiga en el compartidor o en otra persona para que se sienta mejor.
- Amigo rosado: usas esos lentes rosados y finges que la situación no fue tan mala como el compartidor está haciendo. Si es usted, el objetivo es hacer que el participante se sienta mejor pase lo que pase.
- Amigo competitivo: no quieres escuchar a tu amigo. Si eres tú, su historia de infortunio es una oportunidad para que demuestres que puedes compartir una mejor historia de vulnerabilidad que ellos. No te superarán.
Ser imperfecto requiere amigos que estén dispuestos a hacer un esfuerzo adicional contigo. ¿Eres tu?